Una chica acusó a un cliente nuestro por intentar darle un beso y tocarle la pierna cuando estaban en casa de ella tomando una cerveza. Por ello le pedían 3 años de prisión y 25.000€ de indemnización. Él siempre fue muy sincero: me dijo que sólo estaban flirteando, que él intentó darle un beso y ella no quiso, que él lo volvió a intentar y ella le volvió a decir que no, en seguida se dio cuenta de que las señales que ella le había enviado las entendió mal o que quizás ella había cambiado de opinión respecto a él. Por educación se quedó un rato más hablando con ella y se fue. Cuatro meses después ella lo denunció.
Han pasado 4 años desde entonces y hasta la semana pasada no tuvo la sentencia absolutoria. Bien está lo que bien acaba: pero por el camino hemos podido demostrar muchas cosas para acreditar su inocencia. Él está muy agradecido por nuestro asesoramiento y acompañamiento y al final se ha hecho justicia.
No te la juegues, búscate un buen abogado.